Encontrarás Akari Gastroteka en… C/Cataluña Nº8 Bajo, 31006 Pamplona, Navarra
Alma Ma petite… abran las ventanas, recojan los toldos, saquen las sillas, dejen paso al sol.
Akari significa luz en japonés. Bueno, es algo más que eso. Akari se refiere a una mujer que puede iluminar el corazón de otras personas. Cuando Akari Gastroteka abrió sus puertas hizo precisamente eso, dar un poco de luz a un barrio en periodo de construcción que contaba tan solo con tres edificios habitados.
Después de oír esta historia, Ma petite le añade un adjetivo más, el de valentía. Porque hay que ser valiente para abrir un local nuevo en una zona semi desierta. Seis años más tarde, se ha convertido en punto de referencia, donde tienes que reservar con antelación para conseguir una mesa. Hoy comemos en el Soto de Lezkairu.
Akari está situado en la esquina perfecta porque su terraza está bañada por el sol desde la mañana hasta el atardecer. Así que toca relajarse y disfrutar de la carta. Los impulsores y creadores de Akari, Goiza y Javier, han diseñado una carta de raciones pequeñas y bien cuidadas. (Aunque nosotras no las consideramos pequeñas, para nada).
La presentación de los platos es bastante sofisticada y vas a encontrar muchas opciones de temporada, con verduras y pescados de primera calidad. Si todavía estas a tiempo, prueba las Alcachofas confitadas, papada de maskarada, crujiente de trigo y crema de espárragos… ¡te encantarán!
Después, puedes continuar con una de sus hamburguesas -la de atún rojo con mahonesa de wasabi y cebolla caramelizada está buenísima-; o lánzate a probar sus tacos de salmón o sus costillas de cerdo glaseadas.
¡Y no te vayas sin postre! Ma petite terminó su comida con el toque francés y sofisticado de la crème brûlée al limón. Bon appétit nos amis!
Pero tu viaje no termina aquí… el maridaje de los platos de la carta de Akari es espectacular y cada uno de los vinos que ofrecen puede llevarte al aroma de barrica y uvas de las zonas vitivinícolas más grandes del mundo como Chile, Australia, Francia o Alemania. Por supuesto, sin perder la oportunidad de quedarte en casa catando los vinos de Piano, Viña Zorzal de Corella o los de Gonzalo Celayeta.
Un escaparate de premios… la barra está sostenida por los reconocimientos cosechados en estos primeros años de apertura. Si te pasas este fin de semana, disfruta de la mañana con alguno de sus pintxos finalistas en las ediciones anteriores a la Semana del Pintxo. ¡No te cortes!