Encontrarás Café Allegro en… Avenida Sancho el Fuerte, 24, 31007 Pamplona, Navarra

Consejo Ma petite… Ponme uno de cada, por favor

 

Con nuestras naricillas pegadas en el escaparate, salivando y con los ojos haciendo chiribitas. Así estamos. No sabemos qué pedir. Si pudiésemos, nos llevaríamos un trozo de cada tarta, seguido de una cookie de cada tipo y, para terminar, una muffin de postre. Y después, volveríamos a por más, a la semana siguiente.  Tal cual.

En el Café Allegro siempre hay cola. No nos extraña nada porque María y Fernando, los encargados, imprimen cuidado y esmero a cada taza de café que preparan.

Ellos nos han contado que el café es una fruta y, como tal, tiene su temporada. Por eso, si vas un día, te prepararán un café traído de Colombia, pero un par de semanas más tarde, le tocará el turno al de Ruanda.  Adquieren el café directamente de las empresas tostadoras. Los granos proceden de plantaciones muy pequeñas donde se cuida mucho su cultivo. En Allegro se trabaja el café como especialidad y, por tanto, la carta de invierno será muy diferente a la de verano.  Como nos ha comentado María, obtener el café así, recién tostado, es como comerte un pan recién hecho.

Sin embargo, Allegro es mucho más. Puedes ir por la mañana y preparar tu propia tostada partiendo de una carta de opciones. Esto nos ha quedado pendiente para la próxima visita. En nuestro primer acercamiento,  y debido a que el estómago ya apremiaba, hemos probado sus bocatas: el vegetal con humus y el de queso crema; acompañados por un buen pintxo de tortilla de patata que siempre es una buenísima opción.

Y nada, que aquí seguimos, salivando y deseando que llegue de nuevo la hora del café.