Redescubrimos… Paseo del río Arga rodeando las huertas de Miluce hasta Mendebaldea

Paseo completo: Cerca de ocho kilómetros.

Recompensa final: Un café para llevar y otros descubrimientos varios, aunque no culinarios

Un consejo Ma petite: Cuando de bosques hablamos, champiñones encontramos

 

Hoy nos apetece bosque y conocemos un rincón de Pamplona que, en esta época del año, está precioso. Árboles, hojas caídas, un río, un puente de piedra, una presa, huertas….este rincón lo tiene todo.

Comenzamos en el parque de la Biurdana y, desde allí, nos dirigimos por la carretera hacia el cementerio cruzando por debajo el puente de San Jorge.  Sabemos que el cementerio no es el lugar al que muchos quisieran ir ahora mismo, pero este pequeño trozo de bosque está muy cerca de ahí. Hay que seguir el curso del río Arga que nos acompañará durante un buen rato.

Una vez que pasamos la puerta del río, nos sumergimos de lleno en el camino, que no puede estar más bonito. Caminar entre árboles es un lujo, teniendo el río tan cerca y con una mañana tan templada. Todo esto es vitamina para el alma. Respira, camina y disfruta del momento.

No nos encontramos con mucha gente, lo que hace que el protagonismo del bosque sea mayor, si cabe, hasta que llegamos al puente Miluce.  Es otro de los puentes medievales de piedra con los que cuenta Pamplona. Éste, en concreto, es el más alejado del centro de la ciudad y, quizás, algo más desconocido. Este puente tiene su historia e, incluso, su propia leyenda. Unos dicen que su nombre proviene del ajusticiamiento que sufrieron unos caballeros al negarse a pagar impuestos al rey Carlos II el Malo, quien mandó ahorcarlos en las lenguas largas del puente, ‘mihi luze’ en euskara. Otros afirman que su nombre proviene del topónimo vasco ‘amil luze’, que significa, precipicio largo. También os contamos que el puente debió de ser destruido durante la guerra de la Independencia para impedir el acceso de las tropas francesas; pero más tarde, en el siglo XIX, se llevó a cabo su reconstrucción. Así que este puente se ha ganado a pulso su lugar y reconocimiento en esta ciudad.

Desde aquí, nos encontramos un camino bien acondicionado porque rodea a todas las huertas de Miluce. La ruta que te proponemos hoy es completar todo su perímetro. De esta forma, irás acompañad@ por el río, situado a tu mano derecha, todo el tiempo.

Obligatorio hacer una parada en la presa. Da gusto sentir la corriente del agua tan de cerca. Casi podemos tocarla. La verdad es que el caudal del Arga es considerable en esta época del año.

Completado el tramo que nos falta, nos encontramos de golpe con el tráfico y la civilización. Esto incluye la subida por la cuesta de Landaben hasta la rotonda de inicio de Barañain, hacia el barrio de Mendebaldea. Esta cuesta es el broche final a casi siete kilómetros de caminata, así que la subida es considerable. Necesitamos un café ya, s’il vous plait!

De momento, nuestra única opción es pedir un café calentito y tomarlo sentadas en un banco del boulevard. Pero esto nos da la oportunidad de ver  -in situ- la actividad comercial del barrio. Así que el café incluye otros descubrimientos. ¡Ojos bien abiertos, queridas Ma petite!

El primero de ellos es la mercería Loly Carreras. Nos encanta cómo está decorada. La misma Loly nos cuenta que tiene su propia línea de ropa infantil, diseñada por ella misma, llamada Picunela. Crea ropa de niños y niñas hasta los catorce años para ceremonias; así como todo tipo de complementos para recibir la llegada de un bebé en la familia, como las capitas de baño y sus neceseres a juego. ¡Qué pena que no tengamos bebés cerca!  

Además, en la mercería puedes encontrar ropa interior y ropa cómoda para estar en casa, justo ahora que nos vemos obligados a tener el sofá como epicentro.

(Nota Ma petite: pregunta por los pijamas de Osasuna de la nueva temporada. Son un regalo perfecto)

Y de ahí, las dos últimas visitas ponen el broche a una mañana muy completa, en la que hemos puesto a trabajar toda la maquinaria Ma petite.  Nuestros dos últimos descubrimientos de la jornada se han ganado su propio post y así lo podéis encontrar en nuestro blog: la tienda de ropa Nudek; y la tienda de fruta, verdura y otros productos locales, llamada La Alacena Green.  Es una lástima no tener dónde tomarnos un vino o una cerveza, porque os aseguramos que el paseo de hoy, bien merece un brindis por todos los valientes emprendedores. Salut nos amis!